El número de ejemplares de este mamífero bioindicador del estado de los ríos ha caído drásticamente en los últimos 50 años en un 60%

Los ríos de León tienen al menos 79 poblaciones de especies de desmán ibérico, un mamífero biomarcador del estado de los ríos que el Catálogo Español de Especies Amenazadas considera ‘vulnerable’. Los coordinadores del proyecto Life+Desmania, Roberto Rubio y Rocío Gallego, presentarán el resultado de las actuaciones desarrolladas durante seis años para revertir la situación en la provincia de León en una conferencia que se celebrará el día 30 en Casa Carnicerías, dentro de los actos organizados en la LII Semana Internacional de la Trucha.

La dificultad del muestro de una especie de «difícil manejo» hace casi imposible determinar el número exacto de ejemplares en los ríos leoneses pero el proyecto Life+ Desmania ha localizado 79 poblaciones en los análisis genéticos de las 216 estaciones creadas en la provincia en las que se ah hecho una caracterización del hábitat con tramos de 250 km de longitud en los que se ha caracterizado parámetros hidromorfológicos, de vegetación e índices de calidad del agua. Aunque la localización exacta de esta especie es el secreto mejor guardado de los expertos para proteger a los ejemplares, la presencia de este mamífero insectívoro semiacuático se distribuye en la provincia en la parte alta de la Cordillera Cantábrica, la Sierra de la Cabrera y los Montes de León. «Pese a ser una especie en peligro de extinción, el estado en León respecto a otras provincias es positivo, dentro de lo mal que está la especie en general», asegura una de las coordinadoras del proyecto, Rocío Gallego.

El Life+Desmania culmina su andadura en León con 1.256 kilómetros de ríos muestreados y con presencia de desmán en 442 kilómetros. Con toda la formación obtenida se han creado cuatro protocolos de actuación para los que se han formado a técnicos, agentes medioambientales, celadores y vigilantes de la Junta de Castilla y León.

Las amenazas

La degradación y la fragmentación de su hábitat son las principales amenazas de la especie. «Principalmente las de origen antrópico», aseguran los coordinadores del proyecto, como la contaminación de las aguas, detracciones ilegales o incontroladas, degradación de los bosques de ribera, pérdida de refugios, la presencia o creación de barreras artificiales y la expansión del visón americano. «Frente a la amenaza del visón americano, especia exótica invasora, se ha ejercido una fuerte presión en la provincia de León por parte de la Junta de Castilla y León para su gestión, control y erradicación con un esfuerzo de trampeo de más de 46.000 tramas/noche realizadas principalmente por los agentes medioambientales y los vigilantes de pesca», aseguran los coordinadores del proyecto.

El proyecto ha permitido realizar actuaciones de conservación y rehabilitación de hábitats para la conservación del desmán ibérico como la permeabilización de un azud en el río y el derribo de otro en el río Yuso (afluente del Esla) para mejorar el paso de los ejemplares.

También se han construido 18 puertos naturales en los ríos de las cuencas del Ancares, Cúa, Cabrito y Eria, que permiten mantener una lámina de agua en ríos de estiaje severo y así mantener una buena comunidad de macroinvertebrados bentónicos, que son parte de la dieta del desmán ibérico. En los seis años de programa se han instalado 17 aforadores (dispositivo para la medición del caudal del río) en las cuencas del Esla, Omaña y Luna «y así asegurar un caudal ecológico para la especie en épocas de estiaje, mediante 12 acuerdos con propietarios y comunidades de regantes».

Para evitar los arrastres de sedimentos al río se protegió un talud en la cuenta de Torrestío y se acometió la restauración de una escombrera en la cuenca del Torío.

Los técnicos intervinieron en algunos tramos de los ríos con mayor densidad de vegetación y con cierto equilibrio de estratos «para lo que se han proyectado actuaciones de tratamientos selvícolas que corrigen estos problemas y permiten la llegada de un poco más de luz sobre la lámina de agua, con lo que se incrementa la producción de macroinvertebrados creando ambientes mucho más atractivos para el desmán». Más de 80 km de estas actuaciones están en las cuencas del Ancares, Cúa, Luna, Omaña, Bernesga, Torío, Curueño, Porma, Esla, Yuso, Sella, Cares y Eria. «El objetivo es revertir el problema del equilibrio de estratos de vegetación, para lo que se han realizado labores de plantación de sauces mediante estaquillado en la cuenca alta del Esla en más de 1 km de riberas».

Durante la duración del proyecto se han limpiado basuras y residuos de 50 km de riberas de las cuencas del Ancares, Luna, Bernesga, Torío, Curueño, Porma, Esla, Sella y Cares. También se actuó contra la Phytophthora alni, un hongo que hace que se sequen los alisos, hábitat prioritario para mantener el desmán ibérico.

Emergencia en la Tebaida

El incendio de la Tebaida berciana en mayo de 2017 movilizó al equipo medioambiental con la aprobación de medidas de emergencia para minimizar el impacto y restaurar el hábitat del desmán «debido a que el incendio afectó a una población de desmán ibérico muy vulnerable en la provincia». Las actuaciones consistieron en la construcción de albarradas, fajinas y tratamientos selvícolas con el fin de retener y ralentizar el agua de lluvia, que no penetra en el suelo porque drena rápidamente por la superficie, sin que la vegetación la frene, arrastrando todo el material que encuentra hasta los arroyos y ríos. «Este hecho afecta gravemente a la calidad de las aguas, contaminándolas, son aguas turbias debido a la elevada presencia de partículas y cenizas en suspensión. La posterior sedimentación de estos materiales va colmando los fondos de los ríos».

El plan de difusión y sensibilización para dar a conocer la especie, además del espacio creado en www.lifedesman.es, consiste en la organización de acciones seguidas en León por más de 8.000 personas. El proyecto ha recorrido 14 lugares como centros de visitantes de los espacios naturales, bibliotecas, centros de interpretación y exposiciones por las que han pasado ya 25.000 personas. ¿Qué es Life+ Desmania?

El proyecto Life+ Desmania comenzó en 2012 y finaliza este año. Durante seis años se ha buscado revertir la situación de este mamífero insectívoro semiacuático que se distribuye exclusivamente por las zonas de montaña de la mitad septentrional de la Península Ibérica hasta los Pirineos. Las poblaciones de la provincia de León se encuentran incluidas en la categoría de ‘vulnerables’.

El proyecto, cofinanciado al 50% por la Comisión Europea en el marco del programa Life+ se está desarrollando en Ávila, Palencia, León, Zamora, Salamanca y Cáceres. Está coordinado por la Fundación Biodiversidad y cuenta como socios al Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Junta de Castilla y León, Junta de Extremadura, Cesefor, la Fundación Patrimonio Natural de Castilla y León, Somacyl y Tragsatex. Participan como cofinanciadores el Ayuntamiento de Valencia de Don Juan y la Mancomunidad de Municipios del Sur de León y cuenta con el apoyo de las confederaciones hidrográficas del Miño-Sil y Duero, centros de investigación y asociaciones de pescadores.